La tradición apostólica transmite el testimonio del misterio de Jesucristo, el Hijo de Dios; «lo que los Apóstoles predicaron por mandato de Cristo, luego, bajo la inspiración del Espíritu Santo, ellos y los varones apostólicos nos lo transmitieron por escrito…, es decir, el Evangelio en cuatro redacciones, según Mateo, Marcos, Lucas y Juan». (DV 18)

Los tres primeros evangelios (Mateo, Marcos y Lucas) así como el libro de Hechos de los Apóstoles merecen una especial atención y estudio.